Estados Unidos está importando volúmenes históricos de carne
La potencia norteamericana está importando grandes cantidades de carne bovina y reduciendo sus exportaciones en 2023, según Reuters. Estas son las consecuencias de la disminución del inventario bovino a su nivel más bajo en décadas, afectando la cadena cárnica en todos sus eslabones.
De acuerdo con el reporte, la caída en el número de cabezas de ganado después de años de sequía que arrasó los pastos ha provocado un incremento de los precios de la carne en todo el país. Los precios más altos incentivan a las empresas a importar carne más barata y desalientan las compras por parte de mercados como China, Japón y Egipto.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA por sus siglas en inglés) pronosticó que el país podría descender al cuarto puesto en la lista de los mayores exportadores de carne de res al finalizar el 2023, luego de ocupar el segundo puesto en 2022.
Se proyecta que las exportaciones de carne de res de EE. UU. caerán 14 % a cerca de 1,4 millones de toneladas métricas, el nivel más bajo desde que la pandemia de la covid-19 afectó el procesamiento de carne en 2020. Para el próximo año, la escasez de ganado ocasionará que las exportaciones caigan a un mínimo de 8 años de 1,27 millones de toneladas.
Los exportadores de carne vacuna estadounidense como Tyson, Cargill y JBS se enfrentan a un «doble golpe» por el aumento de los precios y por el fortalecimiento del dólar estadounidense frente a otras divisas, lo que hace que los productos estadounidenses sean menos atractivos para otros países.
Pete Bonds, ganadero con sede en Texas, aseguró: «El futuro de esta industria no está aquí en Estados Unidos. Está en alta mar», aseguró para Reuters. (Lea en CONtexto ganadero: EE. UU. tiene 29,4 millones de bovinos para producción de carne, la cantidad más baja en 50 años)
Según analistas de Goldman Sachs, las exportaciones de carne suelen generar mayores ganancias que los envíos dentro del país, por lo cual la pérdida de este negocio limita los márgenes de ganancias de las empresas nacionales y podrían tener resultados negativos al final del año, luego de los mejores rendimientos de 2022.
Importaciones de carne serán históricas en 2023 y 2024
Los procesadores de carne pueden utilizar las importaciones para ayudar a gestionar los bajos márgenes y el alto precio del ganado estadounidense. A menudo importan carne magra de países como Australia y Nueva Zelanda para mezclarla con existencias nacionales para hacer hamburguesas.
El USDA elevó el jueves sus previsiones para las importaciones de carne vacuna en 2023 y 2024 en un informe mensual. Entre enero y septiembre, las importaciones de carne subieron cerca de 6 % respecto al año anterior, y los envíos australianos aumentaron un 49 %, según datos del Gobierno. Entre otros hechos, Paraguay recibió autorización para exportar carne a este país por primera vez en 25 años.
El Centro de Información sobre Comercialización de Ganado proyecta que las importaciones de carne alcanzarán un récord de 1,67 millones de t en 2023, superando el máximo anterior de 1,54 millones de t en 2015, señaló la directora Katelyn McCullock. En 2024, se prevé que las importaciones superen ese récord y lleguen a 1,9 millones de t.
«Los precios de la carne de res ya están en niveles récord en el comercio minorista. Dado que los suministros internos enfrentan caídas significativas este año, la llegada de este producto está ayudando a aliviar lo que podría ser ese aumento potencial», indicó.
Las importaciones de ganado en pie desde México también se han recuperado de la caída del año pasado, y varios lotes se colocaron en corrales de engorde en EE. UU. y de ahí se enviaron al matadero. (Lea en CONtexto ganadero: Precio de la carne en EE. UU. se dispara por la escasez de ganado)
Reconstrucción del hato en EE. UU. se demora
Los ganaderos estadounidenses no han comenzado a reconstruir el rebaño nacional, dijeron productores y analistas, y más de la mitad del ganado del país se encuentra en áreas que todavía están anormalmente secas. El número de novillas en los corrales de engorde de EE. UU. al 1 de octubre aumentó un 1,3% respecto al año anterior, lo que indica que los productores las están engordando para el sacrificio en lugar de mantenerlas en granjas para reproducirse.
El proceso de reconstrucción probablemente será lento, lo que limitará las exportaciones, dijeron productores y analistas. «El número de ganado es cada vez es más escaso»,