13,4 millones de ecuatorianos votarán sobre explotación petrolera y minera en consulta popular
El 20 de agosto de 2023, Ecuador se prepara para una consulta popular que involucra a 13,4 millones de ciudadanos, quienes tendrán la oportunidad de elegir al próximo Presidente y Vicepresidente de la República, así como a los asambleístas. Sin embargo, también se les pedirá que se pronuncien sobre dos temas cruciales para el país. La Corte Constitucional de Ecuador (CCE) aprobó la realización de esta consulta, impulsada durante casi una década por colectivos ambientalistas como Yasunidos.
En el caso del Yasuní, una propuesta popular busca que los ecuatorianos decidan si las reservas de petróleo ubicadas en el eje Ishpingo-Tambococha-Tiputini (ITT), en el Bloque 43 del Parque Nacional Yasuní, deben permanecer en el subsuelo indefinidamente. Actualmente, Petroecuador lleva a cabo operaciones en esta área, produciendo alrededor de 55 mil barriles de petróleo diarios, aproximadamente el 11% de la producción nacional.
Por otro lado, la consulta también abordará la explotación de minería metálica en la Mancomunidad del Chocó Andino, ubicada en la provincia de Pichincha. En esta zona, se plantea la pregunta de si se debe permitir la actividad minera metálica. En el Chocó Andino existen actualmente 12 concesiones mineras, aunque ninguna de ellas se encuentra en operación. El colectivo Quito Sin Minería (QSM) ha impulsado la consulta para evitar cualquier actividad minera en esta área, que abarca el 30% del territorio de Pichincha y fue declarada Reserva de Biósfera en julio de 2018.
Yasunidos ha expresado su apoyo a la consulta popular, afirmando que está en juego la vida de las personas que habitan estos territorios y la supervivencia de un valioso ecosistema para Ecuador y el mundo. Además, la Nacionalidad Waorani del Ecuador (NAWE) se ha sumado a la campaña por el “SÍ” en la consulta, argumentando que, a pesar de cinco décadas de explotación petrolera, su pueblo no ha experimentado desarrollo social, económico ni político.
La realización de esta consulta popular marca un momento crucial para Ecuador, donde los ciudadanos tendrán la oportunidad de decidir el futuro de la explotación petrolera en el Yasuní y la minería metálica en el Chocó Andino. Los resultados de esta votación tendrán un impacto significativo tanto a nivel nacional como en la preservación del medioambiente y los derechos de las comunidades locales