MAG impulsa la Agricultura Familiar Campesina en la provincia de Loja
Con el propósito de fortalecer la Agricultura Familiar Campesina (AFC) en los procesos de producción, comercialización y transformación productiva, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), a través de la Dirección Distrital de Loja, ha entregado 699 carnets y certificados de la Agricultura Familiar Campesina (AFC), en lo que va de este año. Esta iniciativa ha beneficiado a 699 productores directos de los 16 cantones de la provincia de Loja.
En el cantón Catamayo, específicamente en la localidad Chichaca, el MAG realizó un taller práctico sobre la elaboración de balanceados, durante el cual se entregaron nueve carnets de AFC. Además, se socializó e inscribió a 20 productores para que accedan a paquetes tecnológicos subsidiados, acciones que facilitan el acceso a créditos para el programa Súper Mujer Rural, mejoran la productividad y diversifican la producción.
Por otro lado, en la parroquia Chuquiribamba, del cantón Loja, se entregaron carnets y certificados de Agricultura Familiar Campesina, es decir, en toda la provincia de Loja, el personal técnico realiza este trámite y procede con la entrega de los carnets y certificados. Para conocer de la actividad pueden acercarse a la Oficinas del MAG en cada cantón y un técnico lo guiará en este proceso.
Los carnets proporcionados por la Subsecretaría de Agricultura Familiar Campesina certifican el origen social de los productos de agricultores que implementan Buenas Prácticas Agrícolas (BPA). Este reconocimiento distingue a los agricultores que llevan a cabo sus actividades en áreas rurales, mejorando su visibilidad en los mercados y fomentando un comercio justo y un consumo responsable.
Augusta Correa, directora Distrital del MAG, dijo que estas acciones del MAG están orientadas a empoderar a los productores locales, brindándoles herramientas y recursos necesarios para mejorar sus condiciones de vida y asegurar la sostenibilidad de sus actividades agrícolas.
Aseguró que la entrega de carnets y la implementación de programas de apoyo contribuyen significativamente a la dinamización de la economía rural y al fortalecimiento de la seguridad alimentaria de la población.