La sequía agrava todavía más la crisis humanitaria en Afganistán
De acuerdo a las previsiones reveladas por el organismo de la ONU, con sede en Roma, la cosecha de este año será un 20 % inferior a la de 2020 y un 15 % más baja que la media debido a la sequía, mientras que se estima que la necesidad de cereales será un 28 % superior a la del año pasado.
Las estimaciones de la FAO también señalaron que “tres millones de animales están en riesgo”, por lo que el organismo recomendó una protección “urgente” de la ganadería afgana ante la sequía.
Los siete millones de agricultores amenazados por la sequía se encuentran entre los 14 millones de afganos, uno de cada tres habitantes del país, que padecen inseguridad alimentaria grave y necesitan asistencia humanitaria urgente.
La FAO alertó de que “la combinación de una grave sequía, las repercusiones económicas relacionadas con la covid-19 y los desplazamientos generalizados ha azotado a las comunidades rurales del Afganistán, en particular a los agricultores y pastores, que constituyen el eje central de la economía del país”.